Las grandes plazas son el corazón de las ciudades y claros exponentes de su gastronomía en los mercados y comercios. Tienen un gran poder simbólico por lo que muchas veces se ven rodeadas de suntuosas edificaciones de uso religioso y político.
10 preciosas plazas del mundo
En la antigüedad las ágoras eran lugares donde se leían proclamas y se ubicaban los mercados. Son actualmente espacios para la recreación, el comercio y la comunicación pública.
Gran Plaza, Bruselas
Un lugar animado y encantador en cualquier época de año. Está rodeada de soberbios edificios en diferentes estilos arquitectónicos, como la Casa del Rey y el Ayuntamiento.
La carbonada flamenca y los mejillones con papas fritas son platos típicos de esta ciudad.
Plaza del Imam, Isfahán
Un lugar de visita obligatoria por su belleza. El gigantesco bazar, el Palacio de Ali Qapu, antigua residencia del Shah y la Mezquita Sheikh Lotfallah constituyen un entorno tan maravilloso que fue declarado Patrimonio de la Humanidad.
El abgusht es un estofado de ternera delicioso que se elabora con garbanzos y col.
Plaza del Palacio de San Petersburgo
Una de las ágoras más hermosas que se puedan imaginar, cargada de historia y rodeada de suntuosas y monumentales construcciones. Ya el Museo del Hermitage merece la visita, pero además están allí el Ministerio de Marina, la columna del zar Alejandro I y el edificio del Estado Mayor.
Un plato muy popular es la sopa llamada schi, hecha con col, zanahorias, cebolla, apio, laurel y pimienta.
Plaza España, Sevilla
Este precioso ámbito diseñado en estilo neo-renacentista andaluz tiene forma de semi-elipse que mira al río Guadalquivir y está construida en ladrillo y adornada por cerámicas.
No se puede entender Sevilla sin tomarse un buen gazpacho perfumado y colorido.
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10 mejores restaurantes en Sevilla
Staromestké Namesti, Praga
La Plaza Mayor de Praga está en el centro del casco antiguo y rodeada de edificios góticos y de estilo rococó como la Casa de la Campana de Piedra.
Un plato que todos comen en Praga es el goulash de res o cerdo guisado con mucho pimentón y servido en un pan.
Plaza de San Marcos, Venecia
Está rodeada de soberbios edificios como la Basílica de San Marcos con su Campanile, el Museo Correr y el Palacio Ducal. Esta plaza es historia, pero sobre todo es arte.
El delicioso hígado de ternera a la veneciana se trocea, se fríe con cebolla y se sirve con polenta. 
Plaza de la Constitución, Ciudad de México
Más conocida como el Zócalo, está construida sobre lo que fue Tenochtitlán, la antigua capital azteca. Expresa los contrastes de un país de increíbles sucesos históricos.
La versión capitalina de la quesadilla mexicana es una tortilla de maíz rellena de queso y guiso de carne.
Plaza Mayor de Salamanca
Plena de arte barroco nos obsequia una insuperable armonía. El delicado diseño es obra del afamado Alberto de Churriguera.
Esta ciudad nos deleita además con sus quesos, como los de Cantalapiedra.
Plaza de Armas, Cuzco
La antigua capital administrativa y religiosa de los incas fue rodeada después de la conquista por mansiones y templos construidos sobre las edificaciones indígenas.
Entre las delicias que podemos probar en esa ciudad están el inchik uchu, una preparación de yuca sazonada con chile amarillo, maní y salsa de cilantro.
Plaza Stanislas, Nancy
Esta plaza fue construida por Estanislao I, que ideó dos plazas unidas por un arco de triunfo, la Puerta Héré. Está rodeada de edificios clásicos con impresionantes y delicadas fachadas. Es considerada una de las más bellas del mundo.
La quiche lorraine, elaborada con nata, huevos y panceta es un plato de reconocimiento internacional creado en esta región.
La buena gastronomía está en todas las plazas del mundo y es uno de los alicientes para conocerlas.
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