La preocupación por el desperdicio de comida y su impacto medioambiental, social y económico está en aumento. El disfrutar de la gastronomía no está reñido con la preocupación por lograr espacios sostenibles, evitar el uso excesivo de plástico ni con el ahorro de alimentos.
7 tips para utilizar menos plástico
Los polímeros derivados del petróleo se han convertido en un problema que ha ido tomando cada vez más importancia. Tarda en degradarse 1000 años y su presencia en vertederos contamina la tierra y los mantos acuíferos con toxinas y lixiviados.
En los mares, además del daño que hacen a la fauna, se han acumulado 5 enormes islas en movimiento de este material.
El proceso de producción del plástico libera gran cantidad de toxinas al aire, así como la incineración, lo que sucede con buena parte de estos productos.
Evitar las botellas de agua
En España se consumen 3500 millones de botellas de agua al año, y algunos supermercados ecológicos han dejado de venderlas. El agua puede ser comprada en recipientes retornables y la de grifo puede tomarse filtrada y hervida. Puede adquirirse una bonita botella metálica de aluminio o acero inoxidable que servirá por muchos años. 
Con los niños
Los biberones pueden ser de vidrio y resultan igualmente prácticos. Los pañales desechables tan utilizados pueden sustituirse por pañales de tela que además irritan menos la piel del bebé. Hay que evitar adquirir juguetes de plástico que tendrán una utilidad corta e irán a la basura en poco tiempo.
Productos de uso personal
En vez de usar toallas sanitarias, la copa menstrual de varios usos es un buen sustituto. Los bastoncillos pueden reemplazarse por limpiadores reutilizables de bambú, las toallas desmaquillantes de tela se pueden volver a utilizar y los champús pueden ser sólidos, sin envase; la cantidad de lavadas equivale a dos frascos de plástico. Hay que escoger los productos que tengan un mínimo envase o no lo tengan en absoluto.
Al comprar alimentos
Se puede prescindir de las bolsas plásticas en el supermercado, utilizando una de tela de gran capacidad. Los productos congelados suelen usar mucho plástico e igual sucede en la zona de frutería y verdura. Estos alimentos se pueden comprar a granel, con lo que serán más económicos. Debemos preferir los envoltorios de cartón o de papel y los alimentos envasados en vidrio.
Al comer
Los vasos, cubiertos, manteles y platos de plástico se reemplazan fácilmente por los fabricados con otros materiales como vidrio, arcilla, tela, madera o metal. Las pajitas para tomar bebidas son perfectamente prescindibles y generan una gran cantidad de desechos. También se puede eliminar el film para guardar los alimentos en la nevera, usando papel encerado o parafinado, y los zumos se pueden preparar en casa para evitar comprarlos en botellas desechables.
La basura
El volumen de los desperdicios de la cocina puede reducirse drásticamente aplicando algunas medidas, con lo que se usarán menos bolsas de plástico para depositarla. Una de ellas es volver a utilizar los envases de plástico para guardar condimentos, sobras de comida o semillas. También es posible volver a usar embalajes de arroz o pasta para depositar los desperdicios. Otra manera de reducir el volumen de desperdicios es hacer un compost en casa para eliminar los residuos vegetales.
El café
Las cápsulas de café son cómodas y prácticas pero son prescindibles. Usar la antigua cafetera nos dará un excelente café sin generar residuos. 
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