El método de Marie Kondo es válido para distintas disciplinas, y ahora, ha llegado a la gastronomía priorizando el orden para disfrutar de los menús.
Qué es el Método Marie Kondo
Esta mezcla de coaching, feng shui y filosofías tradicionales orientales tiene como objetivo priorizar el orden sobre otras consideraciones. No ha de extrañar que esta metodología naciese en Asia, donde se da mucha más importancia a la harmonía.
La consultora japonesa Marie Kondo indicó en su libro La magia del orden que esta premisa nos permite mejorar en todos los sentidos, tanto en lo personal como en lo profesional. Los principales aspectos a destacar de este método son el minimalismo, la correcta colocación de todos los componentes y la disposición emocional.
En la gastronomía, la aplicación práctica es conseguir que con el orden podamos disfrutar de un menú sabroso. El restaurante UMO de Madrid, en colaboración con la empresa de ginebra japonesa ROKU GIN, ha hecho la primera propuesta de menú siguiendo estos principios.
Para qué se utiliza
El método Marie Kondo tiene varias aplicaciones y lo cierto es que se utiliza para cuestiones de todo tipo.
Por ejemplo, esta metodología nos da una pauta para ordenar mejor los componentes de la vivienda, ya sea en general o estancia por estancia. Por lo tanto, esta es una opción muy interesante para harmonizar nuestro entorno.
La segunda vertiente en la que el método de Marie Kondo funciona bien es la económica. Las empresas pueden aplicar esta filosofía porque aprenderán a racionalizar sus gastos, a gastar lo que realmente necesitan y mejorar el entorno para atraer clientes, sobre todo en los comercios.
Ventajas del método
El método de Marie Kondo ofrece varias ventajas prácticas para los clientes de restaurantes. Conviene conocerlas para poder valorarlas. Son las siguientes:
1. Funcionalidad
Esta metodología aplicada al comer y al beber implica eliminar todo lo que sea superfluo para que disfrutemos de un menú sabroso. La consecuencia práctica es que eliminaremos todo tipo de ornamentos y complementos que no sean necesarios. El objetivo es que la experiencia gastronómica sea funcional y que, sobre todo, no resulte aparatosa.
2. Simetría
La simetría es uno de los elementos imprescindibles que dan coherencia al método. Esto es bueno si lo que pretendemos es no dar más importancia a una parte de la comida que a otra, valorarlas a todas por igual y que el paladar no se empalague demasiado con un sabor. La propuesta de UMO consta de 6 platos con 6 cócteles de ginebra.
3. Harmonía
Hablar del sistema de Marie Kondo es hacerlo de una propuesta harmónica porque el entorno es importante, y mucho, para disfrutar de una experiencia distinta. En los restaurantes o bares, la idea es no pasar nervios o estrés y fijar nuestra atención en los platos que nos ofrecen.
Si somos aficionados a la gastronomía, animamos a conocer la nueva propuesta de UMO que intenta aportar en un menú degustación lo mejor de esta filosofía. Esta es una manera de abrirse a nuevas experiencias.
Sin comentarios
