En el mundo de la gastronomía los postres son un punto y aparte. El buen repostero es un maestro de la combinación tanto como de la habilidad. Un postre es el broche de oro de una comida o una cena, y puede ser una pequeña obra de arte.
Para el verano apetecen los helados, sorbetes, granizados, tartas de frutas, budines y mousses. Aquí os dejamos tres delicias originales, ligeras y frescas capaces de rematar con matrícula de honor cualquier ágape. Todas son para 4 personas, aproximadamente.
Granizado de sandía con frutos rojos
Ingredientes:
- ½ sandía
- 150 g de frutos rojos (grosellas, arándanos, moras...)
- 50 ml de granadina o jarabe de grosellas
- 1 cucharada de mermelada de arándanos negros
- 3 hojas de gelatina
- 80 g de azúcar
- 80 ml de vino de Oporto
- Agua
Elaboración:
Trituramos la sandía, previamente cortada a trozos, el jarabe de grosellas y el azúcar.
Remojamos en agua fría las hojas de gelatinas y, cuando se hayan reblandecido, las escurrimos y echamos en 50 ml de agua caliente, al fuego, hasta que se disuelvan. Colamos y agregamos al zumo, lo vertemos en una fuente y lo ponemos en el congelador. Lo sacamos al cabo de una hora y raspamos hasta conseguir la textura del granizado.
En un bol, mezclamos la mermelada, el Oporto y los frutos rojos. Lo dejamos macerar una media hora. Se sirve en copas el zumo con algunas frutas maceradas.
Sorbete de limón al cava
Ingredientes:
- ½ botella de cava
- ½ de helado de limón
- 2 cucharadas de nata
- 2 cucharadas de vodka
- 3 limas
- 2 hojas de gelatina
- Azúcar
Elaboración
En una cazuela al fuego mezclamos el zumo de las limas, cáscara de media lima rallada y una copa de cava. Ponemos las hojas de gelatina en agua y, una vez blandas, las agregamos a la cazuela. Removemos bien. Pasamos la mezcla a un bol grande y dejamos que se enfríe.
Trituramos el helado y la nata con el resto del cava y el vodka. Lo servimos en copas y ponemos encima la gelatina. Lo adornamos con unos trocitos de cáscara de lima cortados finos.
Para darle un toque sofisticado, vertemos en un plato hondo un vasito de granadina y en otro plato un poco de azúcar. Mojamos los bordes de las copas en el primer plato y luego en el azúcar. También podemos poner una hojita de menta fresca.
Helado de té verde
Ingredientes:
- 5 cucharadas de té verde (Matcha)
- ½ l de leche entera
- ¼ l de crema de leche
- 6 yemas de huevo
- 130 g de azúcar moreno
Elaboración:
Calentamos la leche y el té verde. Cuando rompa a hervir, apagamos el fuego y dejamos reposar mientras removemos bien la mezcla durante unos 5 u 8 minutos.
En un cazo a baño María, mezclamos las yemas y el azúcar, removiendo bien hasta conseguir una crema homogénea. Incorporamos la leche con el té. Seguimos removiendo la mezcla a fuego lento hasta que esté espesa.
Dejamos enfriar y agregamos la crema de leche, batiendo hasta que quede una mezcla sin grumos. La vertemos en un recipiente de metal y la ponemos en el congelador unas 3 horas.
La sacamos del congelador, batimos bien y volvemos a introducir el helado en el congelador. Hay que repetir la operación tres veces. Podemos servir las bolas de helado con pepitas de chocolate por encima y un barquillo pequeño.
El verano es una época ideal para inventarse postres a base de fruta y demostrar a nuestros invitados que dominamos la gastronomía dulce y ligera. Y si no se desea tomar bebidas espirituosas, se puede prescindir de los licores y utilizar cava o vino sin alcohol. Es una opción muy sana y que permite que también los pequeños puedan degustar estos postres.
Sin comentarios