La gastronomía es mucho más que un surtido de materias primas de primera calidad. Es el modo de preparar los manjares y también el estilo de disfrutar de la buena mesa. Y Salamanca tiene todo eso.
Joyas gastronómicas de Salamanca
Jamón de Guijuelo
Famoso donde los haya. Los cerdos ibéricos viven en libertad en la dehesa, alimentándose de bellotas. La D.O. jamón de Guijuelo es sinónimo de máxima calidad.
Farinato de Ciudad Rodrigo
Entre los embutidos tradicionales, este era conocido como el chorizo de los pobres y, sin embargo, hoy se considera una delicatessen. La miga de pan y manteca de cerdo lo hacen un alimento calórico, pensado para las duras faenas de antaño. Hoy, merece ser degustado.
El tostón o cochinillo
El cochinillo asado es un bocado excelso, crujiente y suave. Son también sabrosos los asados de cabrito y de lechazo.
La ternera charra y la morucha
Proporcionan carnes de un rojo intenso y aromático sabor. La vaca morucha vive en la dehesa, por lo que puede considerarse una raza ecológica.
Queso de Arribes
Este queso inconfundible, un poco picante, graso y suave, es un festín para el paladar más exigente.
Lentejas de la Armuña
Son una base de calidad para guisos sabrosos, como también las apetitosas alubias y los garbanzos.
Hornazo
Es el nombre que recibe esta empanada que contiene ibéricos y huevo duro. Una maravilla.
Vinos de Salamanca
Procedentes de la Sierra de Salamanca, son D.O.P. La variedad de uva predominante es la Rufete, autóctona de esta zona. Pero hay otros vinos, como los de Arribes, también con D.O.
Cerezas de la Sierra
Deliciosas cerezas que se recolectan de mayo a agosto. Son crujientes y equilibradas en dulzor y acidez.
Dulces y postres
El repertorio popular es casi infinito: perronillas, hojaldres de Ledesma, turrón de la Alberca, polvorones de avellana, huesillos de Béjar, obispos de Yeltes... y muchos más.
Algunos restaurantes donde saborear los mejores bocados salmantinos
El mesón de Gonzalo
Magnífica cocina charra, donde destacan las carnes, las manitas de cerdo con boniato o el arroz meloso de carabineros.
Recientemente renovado, cuenta además con el espacio de La Barra, en formato showcooking, donde se puede degustar una cocina de inspiración japonesa con toque gourmet.
Don Mauro
Local amplio con terraza en la Plaza Mayor, está abierto todo el día. Además del asador-restaurante, tiene también una cafetería donde saborear su «micrococina».
Especialista en asados de lechazo y tostón con patatas panaderas. A tener muy en cuenta sus tostas vanguardistas y los pescados frescos.
Web: www.restaurantedonmauro.es
Río de la Plata
Establecimiento muy conocido en Salamanca por su larga historia, ya que fue fundado en 1958, y por servir cocina casera tradicional en un ambiente cálido y familiar. Entre sus platos emblemáticos está el cabrito guisado con almendras, las almejas a la sartén y el rodaballo a la plancha. Y para los que no perdonan el postre, hay que probar su arroz con leche.
Web: www.restauranteriodelaplata.es
Azogue Viejo
A pocos metros de la Plaza Mayor, se encuentra este restaurante que se precia de ser uno de los mejores de la ciudad. En sus platos priman los productos locales, acompañados de una selección de vinos muy cuidada procedente de su vinoteca.
Web: www.azogueviejo.com
Tapas 3.0
Un local moderno y divertido en el centro histórico de la ciudad que se distingue por conjugar la tradición y la cocina internacional. Como su nombre indica, su especialidad son las tapas, donde destacan las croquetas de jamón de bellota, el hornazo salmantino versión libre o los huevos rotos con farinato.
Web: www.tapastrespuntocero.es
La oferta de la gastronomía salmantina no se termina aquí. Esperamos que disfrutes de ella repetidamente y en buena compañía. Porque comer es más que alimentarse, descubre y goza de esos rincones llenos de historia y belleza que atesora Salamanca.
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