Un lugar donde disfrutar de una excelente gastronomía pero sin wifi, ni cobertura ni datos puede ser ideal para un período de detox digital durante varios días.
10 lugares perfectos para estar desconectado
En España hay varios destinos donde se puede encontrar la relajación total, descansar del incesante y denso flujo de información digital y hacer una pausa.
Hotel Vincci Selección Estrella del Mar
Situado frente al mar marbellí, aquí la energía se recupera con yoga, el circuito termal y con la práctica de pilates. En el restaurante Mercado de Baraka ofrecen platos como chivo lechal malagueño con hummus de pistacho o parrillada de verduras con aceite de menta.
Casa O´Crego
En la aldea de Vilaquinte, Lugo, se encuentra este hermoso complejo de arquitectura rural, en una zona con robledales centenarios. La construcción es de piedra y madera, y en todas partes hay plantas multicolores. Se puede practicar la pesca en los ríos de la zona o aprender cerámica.
El lacón con grelos y las empanadas gallegas de bacalao son bien representativos de lo que se come en la zona.
Mil Madreñas Rojas
En Salientes, un pueblo de la sierra leonesa, no solo no hay cobertura, sino además, en ninguna habitación de los apartamentos de este pequeño complejo hay televisión.
Como actividades ofrecen paseos por la montaña para ver la fauna, avistamiento de aves y talleres de arte vegetal. Tomar un calderillo bejarano o unas cañas zamoranas completan la experiencia.
Hotel Royal Hideaway Sancti Petri
Este hotel cinco estrellas proporciona a los huéspedes técnicas de relajación para los efectos del excesivo uso de dispositivos electrónicos, como cervicalgias y dolores de muñeca.
Su restaurante Atunante se confiesa enamorado del atún. Ofrece menús emocionales como el crepitante, taco de atún crujiente con frutos secos.
La Panadera
Otro hotel de encanto rural, está en la localidad de Herrera de Ibio y consta de tres casas rehabilitadas con madera, piedra y arcilla. Las visitas a las playas y los acantilados pueden complementarse con paseos a pie o en bicicleta.
Cantabria nos obsequia con quesos con denominación de origen: el de Bejes-Tresviso y el ahumado de Áliva.
Senda de los Caracoles
Ubicado en Segovia, cerca de la villa medieval de Ayllón, se encuentra este hotel rural y spa. Brinda terapias relajantes en medio acuático y packs detox. Además se puede disfrutar del parque natural Hoces del Riaza.
En su restaurante se puede tomar una sopa castellana o un rico plato de pato.
La Fabriquina y el Molino de Valdelagua
Localizado en Agüerina de Belmonte, Asturias, se trata de un alojamiento en dos casas del siglo XVIII remodeladas al detalle. Se puede practicar senderismo, pesca y caza. La cocina asturiana te obsequiará con su fabada o con un suculento chorizo a la sidra.
La Gándara
Ubicado en las Merindades, comarca de Burgos, animan a los huéspedes a desayunar y cenar en conjunto. Se puede visitar el complejo kárstico de Ojo Guareña, pueblos medievales, bosques y cascadas.
El cochinillo y el lechazo asados a la leña son platos imprescindibles de Burgos.
Hotel Hesperia de Madrid
En el Paseo la Castellana, este hotel ofrece un spa y un kit para desintoxicarse: la guía de los parques de la ciudad, una esterilla para yoga e instrucciones para meditar y relajarse. Además ofrece un menú muy saludable en su restaurante La Manzana.
Mas Els Terrat
Conversación, billar, lectura, el calor de la chimenea o disfrutar del ciclismo mientras te adentras en los bosques de la Garocha es la alternativa a lo digital de este alojamiento rural.
En este alojamiento de Gerona hay además una piscina natural. El fuet gerundense es uno de los platos típicos de la región.
Desconectarse puede ser una manera de tomar perspectiva y descansar realmente. La gastronomía, además, siempre es una gran compañera de viaje. 
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